Dedico Aleteos de un zunzún a mis hijos Arturo y Ariel, recordando cuando eran pequeños, a mi nieta Kimberley y a mis sobrinas-nietas Sammy y Jackie (my little butterflies). Ellos han sido, sin saberlo, quienes han inspirado estos aleteos.
Arturo y Ariel
Kim, Jackie y Sammy
Quiero que Aleteos de un zunzún compile parte de mis cuentos, que los escribo para las niñas y los niños, para que conozcan tantas y tantas maravillas que nos rodean y que a veces, ni nos damos cuenta. Los zunzunes, llamados también colibríes, picaflores y de otras maneras más, son por lo general aves pequeñas con picos muy largos. El más pequeño y a la vez, el ave más diminuta del mundo, es el zunzuncito que solo vive en Cuba y es una de las joyas más preciadas de nuestro querido archipiélago. Quisiera que Aleteos de un zunzún sea como una caja de maravillas, en donde siempre nos sorprendamos con lo que leemos y aprendamos siempre algo. Si estos cuentos hacen que vean más con el corazón, me sentiré muy satisfecha. Ojalá los disfruten leyéndolos tanto como yo los disfruto escribiéndolos. La autora
Desde pequeña me gusta escribir y disfruto mucho haciéndolo. En mi familia estamos convencidos que mi papá regresó como un zunzún, de ahí el título de estos cuentos que él tanto me alentó escribir y que cada día me alienta porque sé que vive minuto a minuto junto a nosotros. Todos estos cuentos se basan en algún hecho real del animal protagonista y son un llamado a que cuidemos a la naturaleza como a nosotros mismos. Si te sirven para aprender un poco más y querer más aún a la naturaleza, entonces seré muy feliz y todos los zunzunes del mundo te lo agradecerán.
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